La Decoración de interiores no es sólo una profesión, ni un hobbie para gente con mucho tiempo libre, la decoración de interiores es algo que en un momento u otro de nuestra vida nos atañe a casi todos.
Para muchos la decoración de interiores es un reto, para otros una excusa para ir de compras, para otros es eso que hay que hacer para conseguir que el lugar donde vivimos sea un poco más agradable. En cualquier caso, la decoración de interiores es una tarea que se puede abordar a diferentes escalas:
Decoración de interiores para una casa nueva: La gente que adquiere una casa en
propiedad es la que más tiempo dedica a pensar sobre su decoración. Lo más lógico es empezar por el color de las paredes y los grandes muebles, ya habrá tiempo para los detalles. Muchos prefieren ir completando habitación por habitación, cada uno según sus necesidades.
Decoración de interiores para casas de alquiler: si vives como inquilino en un piso que no es tuyo, lo más probable que no quieras realizar una gran inversión en decoración. En este caso es mucho más sencillo dar toques de estilo con objetos pequeños.
Decoración de interiores con productos rurales: este tipo de decoración está especialmente indicada para casas de pueblo o casas rurales aunque tampoco es incompatible con la gran ciudad. Si os gusta la decoración rústica, las posibilidades son infinitas: alfombras y cortinas de esparto, asientos de anea, botelleros, garrafas forradas, barricas de madera… Si tenéis chimenea dos buenos complementos son los fuelles y las espuertas leñeras… hay muchos objetos que en su día fueron prácticos y que hoy son elementos perfectos para la decoración de interiores de estilo rústico, por ejemplo, los cencerros y las botas de vino se pueden colgar como objetos decorativos.